La Navidad, una de las mejores fiestas del año. Gocemos de esta celebración que nos recuerda que Dios lo ha dado todo por nosotros, que se ha dado a Sí mismo, en la persona de un niño, para que tengamos su Vida. El Niño nacido en Belén es la expresión de un Dios cercano y humilde que nos atrae hacía Él con lazos de amor y no de temor. Celebremos la Navidad con la máxima alegría de nuestro corazón y compartamos con los demás esta alegría.
Homilía del día de Navidad.